Primero hacemos las albóndigas (aquí tienes detallada la receta Albóndigas en salsa) . Lo único que hacemos diferente es que la carne de las albóndigas, esta vez es de pollo y le hemos añadimos un poco de salsa de soja y un toque de jengibre, así resaltamos el sabor de la carne y nos da un aroma diferente. La salsa la hemos enriquecido con verduras asi nos resulta un plato mas completo.
Para las albóndigas: 500 gr de carne picada de pollo, 2 huevos, 2 cucharadas de pan rallado, salsa de soja, jengibre, 1 ramito de perejil, sal y harina.
Para la salsa: 1 cebolla pequeña, 2 zanahorias, 1 tomate rallado, 150 gr. de champiñones laminados ,100 gr. de guisantes cocidos (en conserva o congelados), 1 vaso de vino blanco, 1 vaso de agua o caldo de carne (o un caldo de brick o una pastilla de concentrado de carne), 3-4 cucharadas de aceite sal y pimienta.
En una cazuela, con 3-4 cucharadas de aceite (vale el de freír las albóndigas) sofreír la cebolla bien picada hasta que esté transparente. Añadir la zanahoria cortada en rodajas finas y cocinar un poco. Echar el tomate rallado y rehoga unos minutos. Añadir los champiñones y los guisantes, dar unas vueltas y agregar los líquidos, salpimentar e incorporar las albóndigas a la cazuela.
Dejar cocer a fuego lento, durante unos 15-20 minutos, moviendo de vez en cuando la cazuela para que ligue la salsa. Deja reposar unos minutos. Servir acompañadas de la guarnición que más os guste, patatas fritas, puré, arroz blanco…